Los secretos de Rosario de Fátima

Revelada la 3ª Profecia de la Virgen María de Fàtima

Los días 13 de mayo de cada año estan consagrados a la Señora de Fátima. Tal día se conmemora a partir de la apariciòn de la Virgen Marìa a tres pequeños pastorcitos, en la localidad de Fàtima, en Portugal, Desde esa fecha el mundo cristiano de principios del siglo XX ingresò a una nueva etapa de adoraciòn mariana, que es caracterìstica de la grey catòlica. Las apariciones marianas son otro de los misterios de la fe. Han ocurrido en las apariciones de Guadalupe (México, 1531), Lourdes (Francia, 1858), Garabandal (España,1962), y en la época contemporánea ocurre en Salta, Argentina (1990 a la fecha). En el caso de Fátima, y a partir del suceso, se registró asimismo una creciente ola de rumores en torno al evento, que ha atraido e interesado, así como confundido a la opinión pública interesada en este hecho. Ello ha dado pie a que circulen últimamente una serie de rumores, que distorsionan la realidad histórica, como que se le relacionó con un evento astronómico que tuvo verificativo el miércoles 11 de agosto de 1999. Fue en 1917 cuando ocurriò un fenòmeno que atrajo multitudes al pequeño poblado de Fàtima, dado que -supuestamente- la Virgen Marìa revelò 3 secretos a los chicos, uno de los cuales se llamò Lucìa, y que fue quien los describiò allà por 1944, a peticiòn de un jeràrca catòlico de la diòcesis a la que pertenecìa, dado que ella era religiosa y viviò sus ùltimos años enclaustrada. Supuestamente, el secreto tercero -de las 3 partes en que se dividió- debiò ser revelado a màs tardar en 1960, pero el papa Juan XXIII no lo hizo sabrà Dios por què razòn, en el caso de que haya llegado a conocerlo. De momento, se estima que la profecia -aun no revelada- se refiere a la necesidad de salvaguardar la fe, y no a guerras, amenazas nucleares, hambrunas, o todo lo que podamos suponer. Segùn informaciòn captada en fatima .org, todo indica que la pèrdida de fe en Europa es el motivo central del tercer secreto de Fàtima. Para una mejor comprensión del suceso y de sus consecuencias, a continuación se anota una cronología de los hechos, apuntando incluso un antecedente poco conocido: Los niños Lucía dos Santos ( de 9 años de edad), Francisco Marto (de 8) y Jacinta Marto (6 ), a lo largo de 1916, fueron testigos de tres apariciones angelicales, en las que un sujeto masculino de aproximadamente 15 años de edad les instó a rezar, siendo este hecho precedente a las apariciones marianas que se dieron como se refiere a continuación: *13 de mayo de 1917, en los alrededores de la Cova de Iria, cuando pastoreaban, los niños mencionados se arrodillaron para rezar, cuando un relámpago cruzó el cielo limpido. Corrieron despavoridos colina abajo, pero al llegar al llano vieron una visión divina: justo sobre un roble, había una mujer joven, de pie entre el follaje, que llevaba un velo bordado de oro. Ella les dijo que volvieran a la cueva los dias 13 de cada mes durante seis meses. Les prometió asimismo que irían al cielo, pero que Francisco debía rezar muchos rosarios para conseguirlo. Cuando él se comprometió a hacerlo, pudo ver la imagen, más no escuchar a la misma. La aparición se deslizó por los aires hacia el este y desapareció. *13 de junio de 1917: hacia el mediodia, los niños -acompañados de una cincuentena de fervorosos vecinos- llegaron al roble donde un mes antes se materializó el ente femenino que vieron, y comenzaron a rezar. De repente, Lucía señaló al cielo y afirmó que la Virgen ya estaba con ellos, y a partir de ese momento entregó una serie de secretos. Antes animó a Lucía a que aprendiera a leer y a escribir. Los acompañantes no vieron absolutamente nada pero coincidieron en lo siguiente: 1) la luz solar se atenuó sensiblemente, 2) percibieron una especie de zumbido , alternándose con la voz de Lucía, que era quien llevaba la conversación, 3) las ramas del roble se inclinaron como si soportaran un peso, y 4) cuando la Virgen se retiró, escucharon un estrépito, al tiempo que una nube blanca se dirigió al este. *13 de julio de 1917: los 3 niños regresaron a la cueva, acompañados de unos 4 ó 5 mil curiosos. La aparición dirigió más mensajes a Lucía y la instó a rezar diariamente para que la guerra terminara, pero además reveló algunos "secretos" más. Lucía a su vez pidió un milagro para hacer evidente la aparición, y que los asistentes se convirtieran, más la Virgen marcó la fecha del 13 de octubre para revelar su identidad. Lucía le pidió asimismo que sanara a algunos enfermos del pueblo, más la Virgen accedió a hacerlo, sólo si los enfermos rezaban fervorosamente. *13 de agosto de 1917: los niños no acudieron a la cita, dado que en esos momentos eran interrogados por el subprefecto de Ourem, bajo cuya jurisdicción política se hallaba el poblado de Fátima. Llevaban ya desde el dia 11 siendo interrogados, con objeto de encontrar evidencias de que se t rataba de un ardid propagandístico de la iglesia, a través del cura local. Habian sido trasladados a Ourem, y en el edificio del gobierno fueron interrogados por aparte, amenazándoles de muerte y asegurándoles que sus compañeros ya habian sido muertos. Sin embargo, una multitud acudió al sitio y pudieron observar los fenómenos ya descritos: una detonación, un relámpago, en el momento en que debía aparecer sobre el roble, e inmediatamente después, la nube blanca se elevó y desapareció rápidamente. Los niños lamentaron mucho no haber estado presentes. *19 de agosto de 1917: intempestivamente, cuando pastoreaban a las afueras de la villa de Valinhos, tuvieron una visita sorpresa y la aparición les dijo que el milagro de octubre sería menos magnífic, les urgió a no perderse ningún encuentro futuro, y les rogó que rezaran por los pecadores e hicieran sacrificios por ellos. *13 de septiembre de 1917: unos 30 mil peregrinos, llegados de todos los rincones de Portugal, se apostaron a las afueras de la cueva desde los días previos. A mediodia, con la presencia de los niños, el cielo comenzó a oscurecerse y las estrellas brillaron en el cielo -a pesar de la hora que era- y la nube blanca se posó sobre el roble, y en ese momento desapareció. Mientras, los niños rezaban y entonces se produjo un milagro, una lluvia de pétalos blancos de flores inundó la cueva aunque se desintegraban antes de tocar el suelo. El suceso fue fotografiado por un funcionario del gobierno, Antonio Robelo Martins, quien publicó las imágenes años después. Presenció asimismo el hecho, un jar´qrca cat´locio, el vicario de Leiria, monseñor Joao Quareman, a quien se debe una descripción detallada del evento. El mensaje de la Señora se refirió a la necesidad de elevar más plegarias para que la guerra llegara a su fin. *13 de octubre de 1917: cuando por fin llegó la fecha anunciada por Lucía a todo Portugal, unos 70 mil asistentes abarrotaban el lugar. Para entonces, prácticamente la mayoría rezaba interminablemente el Rosario y el Ave María, lo que daba como resultado un escenario muy peculiar, sobre todo si se considera que llovía incesantemente y a pesar del lodazal, los peregrinos continuaban incansablemente rezando. Había presentes en el lugar funcionarios eclesiásticos y del gobierno, además de periodistas. Cuando los niños se hincaron para orar, frente al roble, Lucía ordenó que la muchedumbre bajara los paraguas y se sumaran a su oración, y enseguida anunció que la aparición se acercaba. Para entonces la lluvia era pertinaz y menuda. La aparición se dirigió únicamente a Lucía y le reveló su identidad: Nuestra Señora del Rosario, quien le pidió se edificará una capilla en su honor en la misma Cueva de Iria. Asimismo, le predijo que la guerra estaba por concluir. Posterior a ello le mostró a los niños una serie de visiones, después extendió los brazos y de ellos surgieron unos rayos de luz. Lucía gritó entonces a la multitud que volteara a ver el sol. Como había estado nublado, no había aparecido el sol, pero en el momento señalado las nubes se abrieron y dejaron ver un enorme disco plateado que giró sobre sí y despedía haces multicolores hacia todos lados, emanando calor simultáneamente. Repitió los giros dos ocasiones durante los 12 minutos que duró el fenómeno, en el cual una vez se precipitó al suelo y cuando estaba a punto de estrellarse- que hasta la multitud gritó se detuvo y se elevó de nueva cuenta. Para entonces, la lluvia había desaparecido y el suelo y las ropas estaban secas totalmente. De este suceso se recogieron decenas de testimonios totalmente objetivos, a lo largo de los años y décadas subsecuentes. 1919: el pequeño Francisco Marto murió de neumonía 1920: la pequeña Jacinta murió de neumonía 1921: Lucía dos Santos ingresó a un convento en la ciudad de Oporto. 1941: Lucía escribe un relato de los hechos y revelaciones, a petición de su obispo. Fue entonces que habló de los secretos; dijo que durante la aparición de junio de 1917, Nuestra Señora del Rosario le confió que Francisco y Jacinta morirían pronto y se reunirían con Ella "en el Cielo". Lucía anotó asimismo que las principales revelaciones se dieron en el encuentro del 13 de julio de 1917. La revelación fue dividida en tres partes. Las 2 primeras ya fueron hechas públicas; la primera fue una visión del infierno que dejóa Lucía totalmente aterrorizada. La segunda parte refería que otra guerra mundial azotaría a la humanidad "si el hombre no dejaba de ofender a Dios". La Virgen habría anunciado que la guerra sería anunciada por una misteriosa luz en el cielo, lo cual habría ocurrido el 25 de enero de 1938, cuando la aurora boreal fue espectacular. La Virgen asimismo rogó al mundo que orara por la conversión de Rusia "o ese país extendería sus errores por todo el mundo". Con relación al tercer secreto, Lucía dos Santos estableció que debía ser dado a conocer en 1960 o cuando ocurriése su muerte, lo que pasara primero. Como no se dio a conocer en 1960, la Virgen María pidió licencia para aparecerse en Garabandal en 1961 y dar nuevos mensajes. Y Sor Lucía falleció a los 97 años de edasd en 13 de febrero de 2005, siendo canonizada por el papa J.P. II. Los otros dos pastorcitos fueron beatificados con anterioridad, en 13 de mayo de 2000, por el papa J.P. II. Finalmente, el tercer secreto fue hecho público por el Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Angelo Sodano, el 13 de mayo del 2000, cuyo Comentario Teológico fue realizado por el entonces Cardenal Joseph Ratzinger, hoy papa Benedicto XVI. El texto es el siguiente: "Escribo en obediencia a Vos, Dios mío, que lo ordenáis por medio de Su Excelencia Reverendísima el Señor Obispo de Leiria y de la Santísima Madre vuestra y mía. "Después de las dos partes que ya he expuesto, hemos visto al lado izquierdo de Nuestra Señora un poco más en lo alto a un Angel con una espada de fuego en la mano izquierda; centelleando emitía llamas que parecía iban a incendiar el mundo; pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él; el Angel señalando la tierra con su mano derecha, dijo con fuerte voz: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia! Y vimos en una inmensa luz qué es Dios: 'algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan ante él' a un Obispo vestido de Blanco 'hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre'. También a otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza; el Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad medio en ruinas y medio tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas; y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones. Bajo los dos brazos de la Cruz había dos Angeles cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios".

Esta es la versión oficial del tercer secreto, empero hay quienes sostienen que es distinto al verdadero, o sea, que no es el auténtico. Para comenzar, no debió ser más un secreto después de 1960, puesto que en el mensaje auténtico habríase mencionado el año de 1972, como el del acontecimiento a advertir, mismo que estaría relacionado directamente con la Iglesia. Esta sería la razón por la cual la jerarquía lo habría mantenido en secreto, constituyendo 'la mentira del siglo'.